Domina el uso de tu tarjeta de crédito con esta guía inteligente
Aunque el uso de tarjetas de crédito conlleva ciertos riesgos, no es necesario eliminarlas de tus opciones de pago.
¡Descubre formas prácticas de hacer buen uso de tu tarjeta de crédito!
Siguiendo las recomendaciones que a continuación te ofrecemos, podrás utilizar tu tarjeta de manera inteligente, evitando riesgos y aprovechando sus beneficios.
Revisa los siguientes consejos para aprender a gestionar tus finanzas personales:
Evita prestar tu tarjeta
Prestar tu tarjeta de crédito puede generar problemas financieros. Muchas personas terminan con deudas y un historial crediticio negativo porque el préstamo no fue pagado por el tercero.
Por ello, es mejor no prestar tu tarjeta. Recuerda que es un recurso personal y cualquier inconveniente relacionado con ella será tu responsabilidad.
Aunque se trate de alguien de confianza, piénsalo dos veces antes de prestar.
Controla tus gastos
La tecnología facilita el seguimiento de tus gastos. Muchos bancos ofrecen aplicaciones que permiten monitorear el historial de compras, ayudándote a registrar cada pago y a saber cuánto puedes gastar en el mes.
Si tu banco no ofrece esta herramienta, mantén actualizada tu hoja de gastos a diario. Monitorear tus pagos te ayudará a evitar sorpresas desagradables.
Prefiere pagos en efectivo
Realizar pagos en efectivo suele ser más ventajoso. Además de obtener buenos descuentos, evitarás acumular deudas.
Por supuesto, hay ocasiones en que el pago a plazos es necesario. Por ejemplo, si tu nevera se rompe y no tienes suficiente dinero, usa tu tarjeta, pero divide el monto en pocas cuotas.
Intenta pagar el menor número posible de cuotas, ya que los intereses pueden incrementar el costo total. Asegúrate de que la deuda se ajuste a tu presupuesto mensual.
Establece un límite adecuado
Para mantener el control financiero, ajusta el límite de tu tarjeta. Algunas entidades aumentan el crédito para buenos pagadores, pero esto puede ser arriesgado.
Imagina tener un límite de 8 mil pesos con un salario de 3 mil. La tentación de gastar aumenta y el riesgo de endeudamiento también.
Te recomendamos que el límite de tu tarjeta no exceda el 30% de tu ingreso mensual. Si es mayor, necesitarás un control más estricto de los gastos.
Usa una hoja de cálculo para supervisar tus desembolsos.
Utiliza un solo tarjeta de crédito
Tener múltiples tarjetas puede llevar a gastos excesivos. Los límites combinados pueden superar tu ingreso mensual, provocando compras más allá de tus posibilidades y dificultando el pago de las deudas.
Para evitar esto, concentra tus transacciones en un solo tarjeta. Así será más sencillo seguir los pagos y controlar tus gastos.
Paga la factura a tiempo y en su totalidad
Nunca retrases el pago de tu factura de tarjeta de crédito. Las tasas de interés son altas y pequeñas cantidades pueden convertirse en grandes deudas.
Si la cuenta es elevada, no es recomendable pagar solo el mínimo y dejar el resto para el mes siguiente. Esto conduce al crédito rotativo, que también tiene altos intereses.
La falta de pago puede desencadenar una bola de nieve de deudas. Por ello, siempre paga el total de la factura y mantén un límite bajo y manejable.
Elabora un plan financiero
Para mantener tus finanzas equilibradas, ajusta tus gastos a tu presupuesto. La regla es sencilla: nunca gastes más de lo que ganas.
Primero, reúne todas las fuentes de ingreso de la familia (salarios y ganancias adicionales) y ten claro cuánto dinero entra mensualmente. Este será tu límite de ingresos para el mes.
Luego, crea una hoja de cálculo para registrar todos los gastos. Anota los valores de cada factura y recibo.
Este control te ayudará a visualizar los costos fijos y variables. Si te resulta difícil usar una hoja de cálculo, existen otras herramientas de gestión financiera, como aplicaciones o incluso un cuaderno.
También establece una meta de ahorro. Por ejemplo, reduce los gastos no esenciales hasta lograr ahorrar un 20% de tu ingreso mensual.
Este monto debe destinarse a una reserva para emergencias.
Aprovecha los beneficios
Las tarjetas de crédito suelen ofrecer programas de fidelidad. Cada compra acumula puntos (o millas) que se pueden canjear por productos o servicios, como cosméticos, entradas o pasajes aéreos con descuento.
Sin embargo, presta atención a posibles trampas. Algunas tiendas asociadas pueden inflar los precios.
Además, algunos programas de millas pueden tener costos adicionales. Haz los cálculos necesarios para verificar si los beneficios realmente compensan.